Alexandra Lynn Vickery

Fundador, Abogado de Inmigración

Como fundadora de Vickery Immigration, Alexandra se dedica a transformar la promesa de igualdad ante la ley en una poderosa realidad para sus clientes. Ayuda a corporaciones de todos los tamaños a prosperar en el mercado global al agilizar los complejos procesos de inmigración, lo que permite que las empresas se concentren en formar equipos excepcionales. También ayuda a los profesionales a aprovechar su potencial empresarial, facilitando su ingreso, establecimiento y crecimiento, al tiempo que garantiza que sus necesidades de inmigración se alineen con sus objetivos comerciales. Además, Alexandra representa a familias e individuos en la obtención de la residencia permanente, guiándolos a través de las complejidades del sistema de inmigración de los EE. UU. para que puedan construir un futuro próspero en los Estados Unidos. Esto incluye ayudar a los clientes que buscan una segunda oportunidad después de enfrentar reveses o cuyo proceso de inmigración ha estado plagado de obstáculos uno tras otro.

Alexandra trabajó durante muchos años en algunos de los bufetes de abogados de inmigración más prestigiosos del país. Vickery Immigration le permite la libertad de superar límites, redefinir posibilidades y promover cambios transformadores en el panorama de la inmigración. Alexandra se niega a encasillarse y comprende que hay magia en el proceso de empezar de nuevo. Sus clientes recurren a ella para resolver sus problemas de inmigración más complejos y, con un cuidado y una conexión genuinos, su objetivo es aliviar las cargas de los clientes, uno a la vez, cada vez. Ella está aquí para apoyar a la joven con DACA que recibió un consejo equivocado, al hombre que busca una segunda oportunidad después de superar problemas de salud mental y a la empresa que navega por las complejidades involucradas en patrocinar a un empleado cuyo proceso de inmigración fue poco convencional.

La diversidad de orígenes de Alexandra le ha inculcado un profundo aprecio por la riqueza de la diversidad. Su madre, una afroamericana negra de un pequeño pueblo de Luisiana, creció en una familia de clase trabajadora en la que ambos padres tenían trabajos de tiempo completo pero luchaban por llegar a fin de mes. En cambio, su padre, un hombre blanco de un suburbio de las afueras de Boston, disfrutaba de los veranos en una cabaña familiar en Maine. Estos orígenes tan diferentes han dado forma a la capacidad de Alexandra para conectarse de manera significativa con personas de todos los ámbitos de la vida, un rasgo esencial para un abogado de inmigración, que la ha ayudado a entablar relaciones con los clientes y ganarse su confianza con el tiempo. Una América diversa fortalece a las comunidades e impulsa el progreso social, y ella está orgullosa de ayudar a empresas de todos los tamaños y a personas de todos los orígenes a navegar por el proceso de inmigración, asegurando que sus historias y contribuciones únicas enriquezcan el tejido de nuestra nación.

Combina la creatividad con la comunicación estratégica, reconociendo que las historias de inmigración deben resonar más allá de la jerga legal. Al pintar una imagen vívida del impacto humano de cada caso, se asegura de que las narrativas de sus clientes se destaquen, lo que permite a los funcionarios de inmigración tomar decisiones con una comprensión clara de las implicaciones de la vida real y los riesgos personales involucrados. 

Entender el razonamiento detrás de las necesidades de sus clientes es el eje central de su práctica. Ella está comprometida a desmitificar el proceso de inmigración, asegurándose de que sus clientes comprendan cada paso de su proceso. Hay poder en el conocimiento y valor en comprender tanto la estrategia como la ley que sustentan cada decisión tomada en un caso.